Los creadores —no necesariamente artistas— deben tener un portafolio para
mostrar sus proyectos, colaboraciones o trabajos. Si pensamos que profesiones no
tan “creativas” no requieren demostrar correctamente la experiencia, tenemos una
idea equivocada. Es obvio que para profesiones relacionadas con el diseño
gráfico o la fotografía, disponer de un portafolio