Se acabó la excusa del "no tengo tiempo"

El tiempo es oro y debemos saber aprovecharlo. Organización y disciplina son claves para poder hacer lo que queramos.

Se acabó la excusa del "no tengo tiempo"

Hoy quiero hablar de los side projects y de por qué es bueno tenerlos, pero sin llegar a agobiarse.

Lo normal al llegar a casa después de trabajar es estar cansado. Programar o trabajar en algo relacionado con el desarrollo de software es agotador mentalmente y es muy difícil concentrarse toda una tarde en desarrollar un side project. Además, tenemos cosas que hacer fuera del trabajo: familia, amigos, ir a hacer la compra, deporte, descansar...

Un side project puede nacer como algo con lo que ganar un dinero extra a fin de mes, pero también puede ser para aprender una tecnología. Primero hacemos un curso y luego lo aplicamos en una idea que tenemos. Dependiendo de qué queramos hacer tendremos que dedicarle más o menos tiempo.

¿Por qué hacer un side project?

- Aprenderás a ser disciplinado. Nadie te va a decir que lo hagas, pero aunque no te apetezca, si tienes disciplina luego te sentirás genial cuando termines de programar una tarde aunque te diese pereza.

- Aprenderás cosas que no están relacionadas con tu trabajo del día a día.

Planifica tu tiempo y tus tareas

Mi recomendación es que dediques 2 ó 3 horas a la semana de concentración 100%. Nada de Twitter abierto o cualquier otra distracción. El tiempo que le dediques debe ser realmente productivo.

Ponte objetivos y haz una lista de tareas para realizar cada día que trabajes en tu proyecto. Si no te organizas no serás productivo y acabarás por desperdiciar horas de trabajo. La planificación es muy importante.

Al final del me, habrás dedicado 10 ó 12 horas a ese proyecto sin haber muerto por el camino. Simplemente con una tarde o dos a la semana.

Eres el único responsable de tu proyecto

En el día a día, seguramente escribas código, resuelvas problemas y escribas tests, pero en el caso de un side project lo más probable es que te encuentres solo ante el peligro. ¿Cómo se envía una newsletter? ¿Qué acciones de marketing tengo que realizar? Las tareas que tengas que realizar se saldrán de lo que haces en tu día a día y eso es bueno, porque practicarás y aprenderás cosas que en el trabajo no harías.

Puede que tu proyecto crezca y necesites apoyo en alguna parte del mismo, así que también puedes buscar ayuda. Compañeros, amigos o gente que conozcas podrían estar dispuestos a echarte una mano porque a ellos también les guste lo que estás creando.

Dado que vamos a dedicar un tiempo prudencial al proyecto, debemos escribir una lista de tareas que nos lleven a conseguir nuestro objetivo, y eso no solo nos ayudará en este proyecto sino que lo veremos reflejado en las actividades cotidianas de nuestra vida. Adquiriremos el hábito de organizarnos y centrar nuestros esfuerzos en aquello que nos haga más productivos.


Por ejemplo, si te marcas el objetivo de cocinar un solo día para toda la semana no vas a llegar a ese día sin tener la compra hecha y sin saber qué vas a cocinar, ¿no? Primero, planificarás qué día cocinarás. Después, harás el menú de la semana. Teniendo el menú, podrás hacer la lista de la compra y, teniendo la lista de la compra sabrás cuándo debes ir a comprar los productos.

¿Y si quiero leer un libro al mes? El proceso es el mismo: si tiene 300 páginas, tengo que leer 10 páginas al día, pero se que no todos los días voy a poder leer. Si en total son 70 páginas a la semana, ¿por qué no leo 35 páginas dos días a la semana?

Con un side project pasa lo mismo. ¿Cuál es tu objetivo? Si es crear una aplicación que haga lo que sea que se te ocurra, no empieces sin planificar lo que tienes que hacer, sino que deberías seguir el camino inverso: quiero llegar a hacer una aplicación de gestión de reservas en una sala, por ejemplo. Para ello, tengo que aprender Laravel y tengo que aprender Vue.js. Después tengo que hacer el diseño y después tengo que hacer otra cosa. Define los pasos que debes seguir para llegar a tu objetivo.

Muchas veces ponemos la excusa de "no tengo tiempo" para evitar hacer muchas cosas, pero desde mi experiencia, si nos organizamos bien podemos tener tiempo para muchas cosas. Ya no tenemos que fijarnos en que nos queremos leer un libro al mes, sino que tenemos que dedicar 30 minutos dos días a la semana para terminar un libro. Debemos ponernos objetivos fáciles de conseguir y que divididos en pequeñas partes sean mucho más asequibles.

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