Los ingenieros no son inteligentes

Los ingenieros no son inteligentes

Antes de disparar dardos en contra, leed.

¿Qué palabra usarías para describir a los ingenieros o a la ingeniería? Vicki May, profesora de la Thayer School of Engineering en Dartmouth, cada año evalúa a más de 200 estudiantes de bachillerato y les hace la misma pregunta. "Inteligente" es la palabra más común y usada para describir a los ingenieros. Otra encuesta realizada hace un par de años por Intel también descubrió que los estudiantes eran más propensos a usar la palabra "inteligente" para describir a los ingenieros.

¿"Inteligente" es una buena palabra? ¿Quién no quiere ser inteligente? Pero ¿es positivo etiquetar a los ingenieros como "inteligentes"? Según la experiencia de May, muchos estudiantes quieren ir a la universidad y estudiar ingeniería pero luego, cuando cursan una asignatura científica y les resulta difícil o reciben una mala nota, abandonan sus planes. ¿Cuántas personas están estudiando una carrera de letras después de sufrir con matemáticas de 4º de ESO?

En Darmouth han llevado una investigación sobre el tema y han encontrado que las principales razones por las que los estudiantes pierden las ganas de estudiar matemáticas, ciencias, o ingeniería es un suspenso en un examen. Otro estudio demostró que un 40% de los estudiantes que tenían intención de estudiar una carrera de ciencias cambiaron a una no científica.

¿Por qué una mala calificación en un examen hace que muchos estudiantes abandonen sus planes? Carol Dweck, profesora de psicología en la Universidad de Stanford ha escrito numerosos artículos y libros sobre el tema. Según Dweck, alguien con una mentalidad fija cree que la inteligencia es un rasgo fijo, que se nace inteligente o tonto y que no se puede hacer mucho para cambiar. Por el contrario, alguien con otra mentalidad (MINDSET) cree que la inteligencia es maleable y que podemos aprender y crecer si nos esforzamos lo suficiente.

Si un estudiante con el segundo tipo de mentalidad recibe una mala calificación en un examen, probablemente se sienta decepcionado, pero no será disuadido, buscará un cambio para mejorar. En cambio, un estudiante con una mentalidad fija, es más probable que considere que su baja puntuación significa que no es lo suficientemente inteligente y abandone sus planes de seguir, no cree que pueda hacer mucho para cambiar.

Dweck ha encontrado que los estudiantes con una mentalidad fija son menos propensos a enfrentarse a problemas difíciles, prefieren trabajar en problemas sencillos donde se sienten seguros y puedan tener éxito, así no dejan de demostrar que son "inteligentes".

Por eso, May quiere estudiantes "inteligentes" en las clases, pero no necesariamente aquellos que pueden memorizar hechos, superar exámenes y regurgitar información. Quiere estudiantes que estén dispuestos a pensar de manera crítica, probar nuevas cosas, fallar y aprender de sus errores.

Con un apoyo adecuado y un nivel de dedicación, cualquiera es capaz de convertirse en un ingeniero; puede que no sea un as pero puede aprender, crecer y tener éxito. Ella no busca la palabra “inteligente”, sino a estudiantes que sean “trabajadores, creativos y resistentes al fracaso”. Es lo que hace verdaderamente grande a los ingenieros. Tal vez más estudiantes siguieran sus planes de estudiar ingeniería si se dieran cuenta que el fracaso es parte de llegar allí.

Fuente: Huffington Post